¿Qué queda de los BAM antisubmarinos?
BAM Meteoro. Foto: Armada
Con la publicación hoy, por infodefensa.com de algunos de los detalles técnicos de los 2 nuevos Buques de Acción Marítima (BAM) que construirá Navantia para la Armada, es del todo inexcusable que surjan dudas razonables sobre el rumbo final del programa. En origen, estas unidades fueron anunciadas como versiones orientadas a la guerra antisubmarina (ASW), pero los elementos finalmente confirmados apuntan a una configuración mucho más genérica y limitada en capacidades; más completa que los 6 de su clase anteriores, pero en absoluto tan especializada como se ha llegado a creer.
Los nuevos buques no contarán con torpedos ni con sonar instalado -sólo se contempla una preinstalación estructural para un sonar remolcado pasivo/activo de tipo modular-, cuya incorporación efectiva dependerá de decisiones futuras. Como elementos ASW tangibles, únicamente se habrían confirmado lanzadores de señuelos acústicos. Preinstalación suena demasiado a «reserva de peso y espacio», lo que no deja de ser descorazonador (o al menos lo era hasta ahora).
Tampoco se integrarán misiles antibuque NSM, a pesar de que esta capacidad se consideraba una evolución natural en los principales buques de la Armada y aunque ello hubiera conllevado la modificación substancial de su diseño -algo que no debería ser un problema por cuanto que aún se estaba en la fase de diseño-. En su lugar, el armamento se centrará en medios de autodefensa de corto alcance: un cañón de 76 m m, estaciones remotas de 30 m m, misiles de punto -ésto sí es una novedad destacable y más que bienvenida- y un sistema antidrón.
Así, los que creímos que a iban a ser los primeros BAM especializados en lucha antisubmarina hemos quedado francamente defraudados. No es que entendiéramos el concepto en sí en buques de esas características, pero dábamos la bienvenida a la especialización de unas plataformas con tamaño y posibilidades de sumar mucho más que la versión OPV. Tras la información hoy de infodefensa, los BAM parecen haber sido reducidos a plataformas multirrol de patrulla avanzada, con nuevas facultades, como la defensa de punto y la operación con drones de 3 segmentos (superficie, aéreo y submarino); con ciertas previsiones de crecimiento tecnológico también, sí, pero sin capacidades ofensivas relevantes. Un diseño prudente, pero que no podrá ser todo lo relevante que podría haber sido -aún siendo un buque mucho menor en comparación con las F-110 y las F-100- en escenarios de mayor exigencia táctica.
Redacción
defensayseguridad.es
2 respuestas
Aire, es todo lo que produce el ministerio de no-defensa. Estos nuevos BAM, a precio de cojón de pato francés, no son más que horas de trabajo para los astilleros, pero de utilidad 0. Una tomadura de pelo.
Los BAM son solo una subvención oculta a NAvantia, sindicatos. Por que con los precios que se pagan no puede ser otra cas