El Exército recibirá nuevos sistemas anticarro SPIKE

Familiarización con el sistema israelí anti-carro. Foto: Exército
Portugal ha iniciado la integración del sistema anticarro Spike LR2, en lo que marca el inicio de una nueva etapa para su infantería ligera y mecanizada. El movimiento, adelantado por @Defence360 en la red social X, se materializó en el Campo Militar de Santa Margarida, donde Eurospike, el Ejército portugués y la agencia NSPA de la OTAN han comenzado los primeros talleres de familiarización.
El misil Spike, fabricado por Rafael Advanced Defense Systems y comercializado en Europa a través de Eurospike GmbH, sustituye en las fuerzas lusas al obsoleto MILAN, aún en dotación con más de 60 puestos de tiro y 700 misiles. Se espera que los lanzadores Spike, capaces de operar más allá de los 5 km y con modos de ataque en perfil alto, proporcionen una capacidad anticarro más adaptada al entorno actual.
La noticia contrasta con la situación en España, donde el programa de adquisición de misiles Spike para el Ejército de Tierra —aprobado en Consejo de Ministros en diciembre de 2022— se encuentra suspendido, tras un largo proceso negociador con la firma israelí Rafael a raíz de la decisión del Gobierno del Presidente Sánchez de rechazar cualquier material y componente tecnológico de procedencia israelí. La Dirección General de Armamento y Material (DGAM) trabaja desde hace meses en buscar alternativas que encajen en el marco de la OTAN y permitan evitar disrupciones en la planificación operativa del Ejército.
Portugal ha optado por un proceso directo con NSPA, sin carga industrial nacional. España, por su parte, había acordado un grado de participación tecnológica y de ensamblaje ventajoso, que ahora ha quedado en suspenso. El resultado es que, mientras unos avanzan hacia una solución operativa, otros permanecen bloqueados por una ecuación de difícil resolución entre urgencia táctica y soberanía industrial.
Redacción
defensayseguridad.es

