Adjudicado el estudio de definición de la plataforma aérea tripulada SIGINT: avance en el programa Santiago II
La propuesta de Indra de hace unos años basada en el Bomabardier Challenger 350
La Subdirección General de Adquisiciones de Armamento y Material de la DGAM del Ministerio de Defensa formalizó ayer, 29 de diciembre, el contrato para el “Estudio de definición de la plataforma aérea tripulada SIGINT” (expediente 2025/0277E), según consta en la Plataforma de Contratación del Estado.
El contrato, tramitado por procedimiento negociado sin publicidad y con un único licitador, ha sido adjudicado a la Unión Temporal de Empresas (UTE) PEM SCAPA por un importe de 16.000.000 euros (sin impuestos). El presupuesto base de licitación y el valor estimado del contrato coinciden, de momento, en esta cifra. Se trata de un contrato de servicios, identificado con los habituales códigos CPV 51000000 (servicios de instalación, excepto software) y 35700000 (sistemas electrónicos militares).
Este contrato cierra la última pata pendiente del programa Santiago II, centrado en resolver carencias históricas en aeronaves tripuladas para guerra electrónica (EW), inteligencia electrónica (ELINT) e inteligencia de señales (SIGINT).
Objetivos del programa Santiago II
El programa Santiago, clasificado como secreto, constituye el sistema conjunto de inteligencia de señales (SIGINT) de las Fuerzas Armadas españolas. Su finalidad última es proporcionar al Jefe de Estado Mayor de la Defensa (JEMAD) información crítica para el planeamiento y conducción de operaciones en entornos de guerra híbrida, saturados y multidominio.
La fase II, aprobada mediante el Real Decreto 1032/2025, con ejecución prevista hasta 2027, lo que arroja un plazo francamente estrecho, debe significar un paso hacia una mayor soberanía tecnológica, priorizando el control nacional sobre el diseño, producción e integración, y evitando dependencias de proveedores extranjeros, como los estadounidenses o israelíes (…) en un segmento crítico como pocos de la defensa nacional.
Como el resto de grandes programas de este acelerado tiempo de rearme que vivimos, se integra dentro del Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y Defensa, aprobado en abril de 2025, y aborda deficiencias operativas acumuladas tras la baja de plataformas como los Falcon 20 en 2020 o el Boeing 707 “Reina del Espectro” en 2016. La ausencia de estas capacidades, vitales, críticas, limitó el uso de medios nacionales en misiones aéreas SIGINT y EW, forzando la dependencia de aliados todavía hoy.
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Subprogramas y detalles técnicos
Santiago II se estructura en otros subprogramas complementarios, con un presupuesto total cercano a los 198 millones de euros hasta 2027:
Plataforma aérea tripulada SIGINT
Este subprograma, directamente relacionado con el contrato adjudicado, comienza con un estudio conceptual para definir opciones viables de aeronaves, arquitectura de sensores, comunicaciones, software, y una hoja de ruta para una fase posterior de integración en tres plataformas.
El sistema permitirá detectar, rastrear y clasificar señales de interés desde el aire, con especial atención a la fabricación nacional de plataformas y sensores.
Aunque la primera asignación informada era de poco más de 5 millones de euros, el contrato formalizado alcanza los 16 millones, lo que sugiere la inclusión del estudio completo y de elementos iniciales de desarrollo.
Las opciones de aeronaves evaluadas podrían incluir las ya conocidas del segmento:
- Airbus A200M (variante del A319CJ, con espacio para operadores y equipos especializados)
- Airbus C295 (compacta y versátil, ya en servicio en el EA)
- Prototipo de Indra basado en el Bombardier Challenger 350 (optimizado para reconocimiento electrónico)
- Gulfstream G550 AIREW (empleado por aliados como la Aeronautica Militare italiana)
La UTE adjudicataria, PEM SCAPA (formada por Airbus Defence and Space SAU e Indra Sistemas SA), debe garantizar una alta participación industrial nacional, en línea con los requisitos de autoridad de diseño española.
Modernización de sistemas de guerra electrónica (REE-EW)
En otro orden, pero complementario y que merece ser apuntado, tenemos al subprograma REE-EW; éste componente actualizará los sistemas de guerra electrónica para el Ejército de Tierra y la Armada, adaptándolos a entornos operativos dinámicos hasta 2035. Incluye el desarrollo de los sistemas:
- GECO (convencional)
- GEL (ligera)
- GEMA (móvil)
Todos ellos montados sobre vehículos terrestres. Indra Sistemas actúa como contratista principal, con un presupuesto asignado de 182 millones de euros y un plazo de ejecución de 2 años.
Hacia el final de la carestía de capacidades esenciales
Santiago II no sólo deberá cubrir carencias operativas críticas, como decíamos, sino que viene para impulsar la industria nacional de defensa, apostando por la producción nacional íntegra e incrementando la autonomía frente a dependencias indeseadas y disrupciones en las cadenas de suministro internacionales.
En el caso del Ejército del Aire y del Espacio, el programa ampliará las capacidades de inteligencia, vigilancia y reconocimiento (ISR) de forma persistente y autónoma, esenciales para operaciones en entornos multidominio y por completo disminuidas desde hace demasiados años.
Con la formalización del estudio para la plataforma aérea tripulada SIGINT, Santiago II avanza, al fin, en el cierre de esa brecha crítica en las capacidades españolas de EW, ELINT y SIGINT.
Redacción
defensayseguridad.es
2 respuestas
La adjudicación del contrato a la UTE PEM SCAPA (Airbus e Indra) el pasado 29 de diciembre no es solo un trámite administrativo; es el disparo de salida para que España recupere una capacidad de «ojos y oídos» que perdió hace casi una década.
Las Plataformas en Juego: ¿Cuál será?
Aunque el estudio de 16 millones definirá la mejor opción, el sector apunta a tres finalistas claros según los requisitos de Indra y Airbus:
-Airbus A321XLR: Es el favorito para la «Multi-misión» (SIGINT + Patrulla Marítima). Permitiría a España tener una flota unificada y con una autonomía de vuelo enorme.
-Bombardier Global (Proyecto Pegasus): Es la plataforma que ha elegido Alemania. Es muy eficiente para volar a gran altura, pero ofrece menos espacio interno que un Airbus.
-Airbus C295: Una opción más barata y táctica, pero con limitaciones de espacio para la cantidad de servidores de IA que Indra quiere instalar.
Lo más relevante no es el avión, sino lo que lleva dentro. El sistema REE-EW (dotado con otros 182 millones de euros) se integrará con el avión para:
Fusión de Datos: No solo graba voces (COMINT), sino que detecta radares enemigos (ELINT) y los clasifica automáticamente mediante Inteligencia Artificial.
Ciberdefensa Activa: El avión podrá realizar ataques electrónicos (jamming) para proteger a otros cazas españoles.
Plazo Crítico: El estudio debe estar listo para 2027, lo que obliga a Airbus e Indra a trabajar a una velocidad sin precedentes en la industria española.
Entiendo que si esta Airbus metida, va a intentar colar el A321XLR o una de sus plataformas. (no me parece nada mál) En principio se habló de 3 aviones, a mi me parecen pocos si como cometa Víctor Fauli se habla de capacidad de patrulla marítima también. Porque no ir también a 4 plataformas AEW sobre el mismo modelo de avión ya que abrimos el melon de dar esa capacidad a las plataformas.