La modernización de los medios aéreos se sigue concretando: 37 nuevos helicópteros multipropósito de Airbus

El H-175 de Airbus, elegido para misiones de acción de Espado (VIP)
El Consejo de Ministros aprobó ayer 2 importantes contratos para reforzar las capacidades aéreas de las Fuerzas Armadas. En concreto, se autoriza la adquisición de 37 helicópteros multipropósito en 2 programas complementarios, dirigidos al Ejército del Aire y del Espacio y al conjunto de las Fuerzas Armadas, con un coste conjunto superior a los 2.000 millones de euros.
6 helicópteros para «misiones de Estado» y de emergencia
El primero de los contratos contempla la compra de 6 helicópteros (H-175 de Airbus) para misiones de transporte en apoyo a la acción del Estado (HACES). Estas aeronaves estarán destinadas al Ejército del Aire y del Espacio y contarán con apoyo logístico operativo e integrado desde su entrada en servicio.
La flota actual de HT.21A y HT.27, encargada de estas misiones, comenzará a causar baja a partir del año 2026.
Con un valor estimado de 239,5 millones de euros, esta adquisición se justificaría en el marco del Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa, en concreto dentro de la línea de actuación ‘Apoyo a la gestión de emergencias y desastres naturales’, y forma parte del Programa Especial de Modernización ‘Helicóptero multipropósito’, anunciado hace escasas fechas.
31 helicópteros NH90: tercera fase del programa
El segundo contrato aprobado se refiere a la adquisición de 31 helicópteros NH90, plataforma considerada eje vertebral del sistema de helicópteros de las Fuerzas Armadas. La operación incluye también su apoyo logístico inicial y se enmarca en la fase III del programa.
Esta compra dice responder a los requerimientos marcados en la Directiva de Defensa Nacional de 2020, que establece la necesidad de una plataforma de tipo medio que permita operaciones aeromóviles y aeronavales, de apoyo logístico, proyección, protección, búsqueda y rescate, operaciones aéreas especiales, recuperación de personal y helitransportes.
El contrato, con un valor estimado de 1.785 millones de euros, se articula igualmente bajo el Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa, y forma parte del Programa Especial de Modernización ‘Movilidad aérea de última generación’, también integrado en la partida de ‘Apoyo a la gestión de emergencias y desastres naturales’.

NH-90 de las FAMET. Foto: Mº de Defensa
Búsqueda de la soberanía industrial y la respuesta operativa
Ambas operaciones, según el relato oficial, refuerzan el compromiso de España con una Defensa moderna, sostenible e integrada, a través de una industria nacional fortalecida, con capacidades logísticas propias y alineada con los objetivos estratégicos europeos y aliados. Al mismo tiempo, buscan garantizar una respuesta operativa eficaz ante crisis y emergencias en el territorio nacional y en entornos multinacionales. Hasta aquí la palabra oficial que sustenta estas adquisiciones, recordemos, adjudicadas directamente y sin concurso. No se trata de lanzar un cuestionamiento sobre los aparatos elegidos, de los que no ponemos en duda su idoneidad técnica y capacidades. Tampoco ponemos en duda la relevancia industrial que supondrá para España, y que seguramente justifica de modo claro la decisión, pero, al igual que en el resto de grandes contratos que se están sustanciando en las últimas fechas, hacer cotidiano lo que debe ser excepcional (Reales Decretos), nos sigue pareciendo un camino criticable, más allá, insistimos, de que la decisión técnica sea la correcta, cosa que podría ser cierta.
El impulso a la familia NH90 es verdaderamente sustancioso. De unos números iniciales, tras el COVID, que se caracterizaron de discretos, hemos escalado a cifras más que importantes, iniciando una renovación parcial más que amplia de la flota de helicópteros en servicio en las FAS, y que todavía deberá completarse a medio plazo.
Redacción
defensayseguridad.es

