El Gobierno se ve forzado a reforzar el compromiso de gasto en Defensa con inversiones estratégicas y más de 850 millones de euros.

La Ministra de Defensa, Margarita Robles
El Consejo de Ministros aprobó ayer una serie de acuerdos de gasto referentes a la mejora de capacidades operativas, logísticas y tecnológicas de las Fuerzas Armadas españolas, así como la industria nacional de la defensa. Estas decisiones, argumentan, están alineadas con los compromisos internacionales de España y el entorno estratégico actual, y suponen una inversión global que supera los 850 millones de euros.
Por ámbitos, el desglose quedaría como sigue.
OPERACIONES DE PAZ Y SEGURIDAD INTERNACIONAL
Uno de los acuerdos más destacados autoriza la aplicación del Fondo de Contingencia por valor de 497.375.090 euros, destinado a sufragar los gastos derivados de la participación de las Fuerzas Armadas en operaciones exteriores y de mantenimiento de la paz. Estas misiones, que están viendo crecer su importancia y ganando enteros en los despliegues, responden, en principio, a tres objetivos estratégicos: garantizar estabilidad y seguridad, combatir el terrorismo y disuadir amenazas contra aliados. Son operaciones que se sustentan en acuerdos del Consejo de Ministros del 17 de diciembre de 2024, y que renuevan ahora sus compromisos de gasto.
FLOTA AERONAVAL Y APOYO A LA UME
El Ministerio de Defensa también ha autorizado compromisos de gasto para el sostenimiento de los helicópteros NH-90 y H-135, la continuidad del programa de submarinos S-80 y la adquisición de material para la Unidad Militar de Emergencias (UME). La inversión total prevista para el periodo 2026-2028 asciende a 53.161.114 euros, desglosada en:
-Helicópteros NH-90 y H-135: 13.145.000 €
-Submarinos S-80: 25.498.122,3 €
-Unidad Militar de Emergencias (UME): 14.517.991,7 €
RED DE ASISTENCIA SEGURA Y MODERNIZACIÓN TERRESTRE
Se ha aprobado un acuerdo marco de 54.226.204 euros para implementar una red segura de asistencia al personal del Ministerio de Defensa desplegado en operaciones y territorio nacional. Además, se ha autorizado una inversión de 34.638.218,95 euros para la modernización de los vehículos de Infantería de Marina VCI Piraña III C, incluyendo la sustitución de torres de armas por sistemas de última generación. Es sin duda llamativa esta última partida, dotada de una cantidad significativa para sólo las 4 torres Lance que dotan a otros tantos vehículos Piraña III, y planteada a un período de tiempo anormalmente largo, 4 años. 4 años, 4 torres, 34 millones…

No son pocos los medios que tiene que verse potenciados y renovados. Batería Patriot
INFRAESTRUCTURAS Y COBERTURAS CONTRACTUALES
El Ministerio de Defensa destinará también 316.800.000 euros al mantenimiento y adecuación de instalaciones militares de la Armada. Este acuerdo tiene una vigencia de un año, con posibilidad de prórroga de hasta 3 más. A su vez, se ha firmado un contrato unificado de seguros por 2.011.700 euros para cubrir las necesidades aseguradoras del Ministerio a partir de enero de 2026.
APOYO A LA INDUSTRIA DE DEFENSA Y TECNOLOGÍA
En el ámbito industrial, se han autorizado medidas urgentes para canalizar ayudas y préstamos a empresas vinculadas al desarrollo de tecnologías críticas. Destacan tres áreas:
Modernización terrestre y aérea: Se incluye tecnología sensorizada y plataformas autónomas.
Programas AIRBUS: Se concederán préstamos directos a Airbus Defence and Space y Airbus Helicopters España para modernización aérea.
INDRA Sistemas: Recibirá apoyo directo para proyectos de defensa en el marco del Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y Defensa.
Estas últimas actuaciones finales forman parte, teóricamente, del cumplimiento de los compromisos internacionales adquiridos por España, que se vieron reforzados en la reciente cumbre de la OTAN celebrada en La Haya el pasado 25 de junio. Cumbre que, recordemos, vino a mostrar la disconformidad del Presidente Sánchez con lo allí acordado, pero donde, a decir de la Ministra, «no se había firmado nada». Llama la atención la forma jurídica -Real Decreto, para situaciones de urgencia, recordemos- para la concesión de préstamos directos a Airbus, en sus ramas Defence and Space y Helicopters, con destino a la modernización de la «flota aérea», por la vía de urgencia, y por la necesidad de poner en marcha el Plan Industrial y Tecnológico para la Seguridad y la Defensa (PITSD). De hecho, no se concreta ningún programa, sino que se liberarán cantidades «dadas las circunstancias extraordinarias, que exigen una rápida intervención administrativa, se considera justificada la tramitación de urgente del procedimiento de elaboración y aprobación del Real Decreto.» La urgencia la motiva la necesidad de puesta en marcha inmediata del PITSD, «para el cumplimiento de los compromisos internacionales en materia de inversiones en seguridad y defensa, ratificados en la reunión de la OTAN y que no pudieron preverse al inicio del ejercicio 2025.»
Obviamente, y como bien dice el texto del Gobierno, no pudieron preverse porque, en efecto, seguimos sin ninguna previsión en lo que ha Defensa corresponde. Todo parece espolearse a fuerza de acuerdos internacionales, cumbres y reales decretos, en una constante negación de la planificación a largo plazo. En cualquier caso, y a la vista de los compromisos de gasto que se han adquirido, malo sería si no pudiera articularse una planificación de mínimos y establecer las bases para consolidar períodos de 4, 5 ó más años donde el gasto esté planteado de manera constante y fiable. No es una ley de financiación, pero, al menos, daría cierta certidumbre.
Redacción
seguridadydefensa.es

